Si ha llegado la hora de que pienses en cómo vas a decorar la habitación de tu bebé y estás planteando diversas opciones porque tienes algunas dudas, entonces no te preocupes porque en este artículo hemos preparado algunas de las ideas más elegantes y llamativas para decorar la habitación de tu pequeño.
Aunque algunas personas optan por un estilo sobrio con blancos, beiges o grises, otras, por contra, se decantan por decorar la habitación del bebé con colores mucho más llamativos como azules, rosas o verdes, y es que ambas opciones son totalmente válidas, así que ¿por qué no mezclarlas? Siempre se puede optar por decorar la habitación con un tono fuerte y otro más claro por ejemplo en grises y rosas.
Aunque estos dos colores parecen, de primeras, totalmente opuestos, resultan ser una combinación muy atractiva y elegante que conseguirá hacer que la habitación de tu bebé se convierta en una de las estancias favoritas de toda la casa.
Si quieres saber cómo puedes combinar el mobiliario y la decoración con estos dos colores hemos preparado varios ejemplos de habitaciones de bebé decoradas con grises y rosas para que te sea superfácil inspirarte y crear tus propias combinaciones.
1 Los muebles infantiles en rosa
Para empezar, una de las ideas que más fuerza tiene es la de escoger la cuna de tu bebé, que será el elemento principal de la habitación, de un tono rosa chillón, o si prefieres un rosa pastel, para que sea el objeto que llame la atención, rodeándola de mobiliario en tonos grises y blancos para que sea la cuna la que más contraste.
Por contra, también puedes hacerlo a la inversa y escoger una cuna de color grisáceo y dejar que sean otros elementos decorativos, o incluso las paredes, las que aviven el resto de la estancia con sus tonos de rosa.
Lo importante es que se cree un contraste entre, por ejemplo, las paredes y los objetos para que se note bien qué dos tonos están utilizando para decorar la habitación, ya que si se mezclan ambos se solaparán y perderán fuerza.
Nuestra sugerencia estrella es la de pintar las paredes grises y blanco, escoger una cuna color rosa y el resto de muebles como la cómoda, los sillones y las estanterías de color blanco; pero, por ejemplo, con detalles sutiles con los pomos en color rosa para que ambos colores se distingan a la perfección y se cree ese contraste tan especial entre ambos.
2 Decoración en escala de grises
Otra opción es escoger una decoración en escala de grises y complementarla con detalles rosas. Se pueden pintar las paredes de gris claro y escoger un pequeño papel de pared para una de ellas que dé en tonos rosados.
También es especialmente bonito que se adorne una pared con alguna pintura en color rosa o, simplemente, decorar esas paredes grises con cuadritos rosas y otros objetos de este mismo tono.
Con esta escala de grises tendremos una habitación mucho más sobria a la que habrá que darle toques de color con los rosas, ya que una habitación totalmente unificada en un color puede quedar demasiado apagada y es muy importante dar energía y luminosidad al cuarto del bebé para que el niño este rodeado de estímulos.
3 Los volúmenes en rosa para destacar
En una nota similar a la anterior, no hay nada mejor que escoger una habitación totalmente grisácea y darle esos golpes de vivacidad con volúmenes de color rosa.
Esto quiere decir que la decoración es extremadamente importante para contrastar con el mobiliario y, por ejemplo, resulta muy importante decorar con objetos como móviles en el techo, cojines en los sillones, cuadritos en las paredes o cajas de color rosa en las estanterías blancas para que así el gris, ya sea de las paredes, de la cuna o de la cómoda, quede perfectamente acompañado por ese color secundario.
Lo bueno de optar por este tipo de decoración es que al ser el rosa un color tan fuerte y llamativo le dará más personalidad a la habitación, pues el gris base actuará como un color elegante y los complementos rosa le añadirán destellos de fuerza y de carácter.
4 Paredes y papel de pared combinado
Una de las formas más fáciles de decorar cualquier cuarto es la de utilizar paredes combinadas y papeles de pared con motivos o diseños especialmente pensados para niños o infantes.
Una forma de dividir los colores de las paredes es la de pintar media pared de un color gris y media de un color rosa horizontalmente. Otra forma de jugar con estos colores es, por ejemplo, pintando dos paredes un color y otras dos de otras; o incluso tres paredes de un color y la última empapelarla con un bonito estriado y luminoso papel de pared con tonos rosa. Se pueden pintar tres paredes de gris y rellenar la cuarta con un papel de flores rosas que hará que la habitación gane volumen y espacio.
No hay nada más divertido que combinar estos dos colores en las paredes ya que además los complementos que colguemos de ellas eran esencial para darle más forma al Cuarto aprovechando estás texturas para aumentar los metros cuadrados.
5 Textiles mixtos para contrastar
Como hemos dicho antes, es especialmente interesante decorar la habitación en gris pero darle toques con volúmenes en rosa. Otra opción es la de combinar los colores a las paredes como acabamos de comentar y utilizar textiles mixtos para crear contraste.
Esto quiere decir que si tenemos la cuna rosa sobre una pared gris podremos poner estantes de color rosa sobre una pared gris opuesta, creando así este mix de colores tan interesantes que sin duda despertarán la atención del niño gracias a su vivacidad.
Si quieres ser algo más conservadoras también puedes optar por pintar las cuatro paredes de un gris suave y contrastar está sobriedad con cortinas, alfombras o ropa de cama en rosa para que se noten estos contrastes de una forma más sutil y delicada.
6 Rellena los huecos con colores rosas
Sin embargo la mejor opción siempre va a ser la de añadir detalles en rosas rellenando todos los huecos que sobren en la estancia. Esto quiere decir que, si tenemos las estanterías de color blanco, nuestra mejor decoración será la de optar por comprar cestas o cajas de color rosa para rellenarlas. También podemos decorar el sillón o la cuna de color gris con unas mantas gorditas de color rosa.
Si la habitación es para una niña, podemos también escoger un perchero clásico donde la ropa quede a la vista y decorarlo con todas sus prendas de color rosa para que estas sean las que contrasten con las paredes grises.
En definitiva, si dejamos que el gris sea el color dominante no nos quedará otra opción que añadir estos rosas en los espacios restantes.